Comer así durante el Ramadán
Comer así durante el Ramadán Al ayunar durante el Ramadán, su metabolismo se ralentiza debido al prolongado período de ayuno. Prepare su estómago para este mes comenzando antes del Ramadán y coma de esta manera durante 30 días.
Modelo nutricional para impulsar el metabolismo durante el Ramadán
Durante el largo período de ayuno en Ramadán, el azúcar en la sangre disminuye inevitablemente. Esto lleva a las personas a consumir alimentos dulces durante las horas iftar. Los alimentos azucarados aumentan la secreción de insulina y causan grasa corporal. Además, el ayuno prolongado agota las reservas de carbohidratos que creamos a partir de verduras, frutas y granos en nuestra dieta diaria. Esto conduce a dolores de cabeza, presión arterial baja y somnolencia. A medida que la inanición continúa, la pérdida muscular puede ocurrir a medida que el cuerpo comienza a gastar de las proteínas de almacenamiento. La mejor manera de prevenir estos problemas es acelerar el metabolismo siguiendo una dieta equilibrada de carbohidratos y proteínas antes y durante el Ramadán. Sugerencias para preparar nuestro metabolismo para los cambios que se experimentarán…
Su desayuno también debe ser equilibrado
La primera regla para acelerar el metabolismo; no te saltes el desayuno. Puede aumentar su tasa metabólica en un 30 por ciento al desayunar dentro de 1 hora después de despertarse. Antes del Ramadán, puedes intentar desayunar antes para acostumbrarte al sahur. Recuerde que debe evitar los alimentos grasos y los alimentos azucarados en el desayuno. Asegúrese de que su desayuno incluya proteínas (huevos, queso, leche), carbohidratos de calidad (productos integrales, avena), verduras de temporada y frutas de temporada para que sea equilibrado y satisfactorio.
Comer así durante el Ramadán: Si dices ‘no puedo tener suficiente’
Como el Ramadán está a solo unos días, trate de reducir la cantidad de alimentos que consume en sus comidas principales. Esto preparará su estómago para este mes y se asegurará de que no tenga dificultad mientras ayuna. Si encuentras que la comida colocada en platos grandes es demasiado pequeña para tus ojos y dices, “Quiero comer más porque mis ojos no están llenos”, reducir los platos que usas hará tu trabajo más fácil.
Evite los postres azucarados después de ayunar
Recuerde que el azúcar no es un grupo de alimentos que nuestros cuerpos necesitan y por lo tanto casi todos los alimentos azucarados se almacenan como grasa. Durante los ayunos largos, nuestros estómagos y cerebros anhelan alimentos azucarados para compensar el bajo nivel de azúcar en la sangre. Si caemos en esta trampa, solo pondremos calorías vacías en nuestros cuerpos y trataremos de perder la grasa al final del Ramadán. Para evitar esta situación, en lugar de postres altos en azúcar procesada, puede recurrir a frutas secas ricas en vitaminas y minerales con alto contenido de fibra. Pero sin olvidar el control de las porciones. Consumir 4 albaricoques secos o 2 higos secos o 3 dátiles secos durante el día evitará tus antojos de azúcar. Las personas con diabetes no deben consumir estos productos sin consultar a su médico o dietista.
No comas sin una ensalada
Especialmente dado que el contenido de pulpa de los alimentos del grupo vegetal crudo es muy alto, consumir ensaladas en las comidas principales aumenta la cantidad de pulpa que tomamos y ralentiza la tasa de vaciado gástrico. Esto ayuda a controlar su hambre durante el Ramadán. Crear el hábito de comer ensaladas antes de empezar a ayunar tiene resultados positivos tanto para la salud estomacal como intestinal.
Calma tu sistema digestivo con té de manzanilla
El efecto relajante de la manzanilla ayuda a prevenir problemas en nuestro sistema digestivo. Con su característica relajante del estómago, la manzanilla se convierte en el salvador de aquellos con indigestión. Lanza 1 cucharadita de manzanilla en agua hervida y prepara cerveza durante 10 minutos. Puedes relajar tu estómago consumiendo este té especialmente después de iftar.
Beba agua durante las horas de descanso
Los tiempos de alimentación más cortos también reducen la cantidad de agua que bebemos. Sin embargo, reducir la cantidad de agua antes del Ramadán para acostumbrarse a la sed puede ralentizar el metabolismo. Dado que un adulto necesita 35 ml de agua por kilogramo por día, trate de consumir suficiente agua durante las horas no de secado. Las personas que no les gusta beber agua pueden aumentar su consumo con varios sabores como limón, rodajas de manzana, pepino, menta.
Comer así durante el Ramadán: Dar paseos regulares
No se olvide de hacer ejercicio para equilibrar su tasa metabólica, que se ralentiza con el ayuno prolongado. Si no está interesado en ningún deporte, puede aumentar la energía que gasta tomando caminatas diarias de 30 a 40 minutos para movilizar el metabolismo. Estos paseos se pueden hacer en promedio 1 hora después de iftar.
El calcio ayuda a controlar el peso
La leche y el yogur son las mejores fuentes de calcio. El calcio es un mineral esencial para controlar el peso y aumentar la tasa metabólica. Además, la leche y el yogur serán la opción correcta durante el Ramadán, ya que pueden proporcionar una sensación de saciedad al permanecer en el estómago durante mucho tiempo con el contenido de proteínas.
Comer alimentos a la parrilla, hervidos o al horno en iftar
Para facilitar la digestión y reducir la cantidad de ingesta de grasa, es necesario cocinar los alimentos a la parrilla, hornear o hervir. Evitar los alimentos fritos, que se consumen con más frecuencia durante el Ramadán, especialmente en verano, ayuda a proteger la salud del estómago y facilitar la digestión.Comer así durante el Ramadán