¿Cómo la gastritis causa pérdida de peso?
¿Cómo la gastritis causa pérdida de peso? La gastritis, una condición que implica inflamación del estómago, puede ser una causa importante de pérdida de peso involuntaria. Esto se debe a que la inflamación gástrica puede afectar el apetito y la capacidad del cuerpo para digerir y absorber adecuadamente los nutrientes.
¿Qué es la gastritis y cuáles son sus causas?
La gastritis es una condición médica en la que la mucosa del estómago se inflama, lo que puede causar síntomas como dolor abdominal, ardor, náuseas y pérdida de apetito. Existen varias causas comunes de gastritis, entre ellas:
Infección por H. pylori: La bacteria Helicobacter pylori es una de las principales causas de gastritis y puede provocar inflamación crónica del estómago.
Consumo excesivo de alcohol: El alcohol puede irritar y dañar el revestimiento del estómago, lo que lleva a la inflamación.
Estrés: El estrés y la ansiedad prolongados pueden aumentar la producción de ácido estomacal, lo que a su vez puede contribuir a la gastritis.
Medicamentos: Algunos medicamentos, como los antiinflamatorios no esteroideos (AINE), pueden irritar el estómago y causar gastritis.
Reflujo biliar: El reflujo de bilis del intestino delgado al estómago también puede provocar inflamación gástrica.
¿Cómo la gastritis causa pérdida de peso?
La gastritis, una condición que implica inflamación del estómago, puede ser una causa importante de pérdida de peso involuntaria. Esto se debe a que la inflamación gástrica puede afectar el apetito y la capacidad del cuerpo para digerir y absorber adecuadamente los nutrientes.
Los síntomas típicos de la gastritis, como el dolor abdominal, la indigestión crónica y la disminución del apetito, pueden llevar a una ingesta calórica insuficiente. Además, la inflamación del estómago puede dificultar la absorción de nutrientes clave, lo que puede contribuir a un desequilibrio nutricional y, en última instancia, a la pérdida de peso.
Es importante destacar que la pérdida de peso asociada a la gastritis suele ser gradual y puede estar acompañada de otros síntomas, como náuseas, vómitos y ardor de estómago. Si no se trata adecuadamente, la gastritis puede empeorar y llevar a complicaciones más graves, como úlceras o incluso cáncer de estómago.