Enfermedades que cursan con sudoración excesiva | SMG
Enfermedades que cursan con sudoración excesiva | SMG La sudoración excesiva, conocida como hiperhidrosis, puede ser un síntoma de diversas enfermedades. Este tipo de sudoración afecta a la calidad de vida de quienes la padecen y puede tener un impacto significativo en su salud física y mental. Es importante conocer las principales afecciones que pueden cursar con sudoración excesiva, como los trastornos endocrinos, la ansiedad, la menopausia, la obesidad, la diabetes y el hipertiroidismo, entre otros, para poder identificarlas y buscar el tratamiento adecuado.
¿Qué es la sudoración excesiva?
La sudoración excesiva, también conocida como hiperhidrosis, es una condición en la que el cuerpo produce una cantidad anormal de sudor, incluso en ausencia de ejercicio o altas temperaturas. Esto puede ocurrir en áreas específicas del cuerpo, como las palmas de las manos, las plantas de los pies, las axilas o la cara, o puede ser generalizada.
La hiperhidrosis puede tener un impacto significativo en la calidad de vida de las personas que la padecen, ya que puede afectar a su salud física y mental. Es importante conocer las causas de esta condición para poder identificarla y buscar el tratamiento adecuado.
Enfermedades que cursan con sudoración excesiva
Algunas de las principales enfermedades que cursan con sudoración excesiva incluyen:
La disfunción de las glándulas endocrinas, como el hipertiroidismo o el hipotiroidismo, puede provocar cambios en la regulación de la temperatura corporal y, por lo tanto, en la sudoración excesiva o hiperhidrosis.
La ansiedad y el estrés agudo o crónico pueden desencadenar episodios de sudoración excesiva, especialmente en las palmas de las manos, las axilas y la cara.
Los cambios hormonales asociados con la menopausia pueden causar sofocos y sudoración abundante.
La obesidad y la diabetes se han relacionado con una mayor incidencia de sudoración excesiva.
Otros trastornos relacionados con el sudor excesivo
Además de las afecciones mencionadas, existen otros trastornos que pueden cursar con sudoración excesiva, como el cáncer. Ciertos tipos de cáncer, especialmente los linfomas y las leucemias, pueden provocar sudoración nocturna como síntoma.
Asimismo, algunas infecciones, como la tuberculosis o la endocarditis, pueden causar episodios de sudoración abundante. Estos episodios de sudor excesivo pueden ser un indicador de que algo más grave está ocurriendo en el organismo.
Por último, algunos problemas neurológicos, como la neuropatía diabética o la esclerosis múltiple, pueden afectar la regulación de la temperatura corporal y provocar sudoración excesiva. En estos casos, el sudor abundante puede ser un síntoma de una afección más compleja que requiere atención médica especializada.