Qué tal añadir otros 6 años a tu vida?
Qué tal añadir otros 6 años a tu vida? Caminar regularmente reduce el riesgo de muchas enfermedades que se desarrollan como resultado de la inactividad.
Caminar regularmente es bueno para estas enfermedades
Los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) indican que el 23 por ciento de la población mundial lleva un estilo de vida sedentario, que ocupa el cuarto lugar entre todas las causas de muerte. Esto se debe a que la inactividad puede llevar a problemas de salud potencialmente mortales como obesidad, enfermedades coronarias, diabetes, hipertensión, síndrome metabólico, osteoporosis, cáncer de mama y colon y depresión. El panorama alentador es que el ejercicio, como caminar regularmente, puede reducir el riesgo de muchas enfermedades causadas por la inactividad o aliviar los síntomas de enfermedades existentes.
Los estudios han demostrado que las personas que caminan y trotan regularmente tienen menos probabilidades de desarrollar la enfermedad y pueden vivir hasta 6 años más si hacen este ejercicio de por vida. Para ser eficaz, debe caminar enérgicamente durante 30 minutos, 5 días a la semana. La duración y el ritmo de caminar se pueden aumentar en el futuro para obtener más beneficios. Sin embargo, es absolutamente necesario consultar a un médico y someterse a un chequeo médico de antemano.
Caminar y enfermedades cardiovasculares
La investigación ha demostrado que caminar regularmente reduce el riesgo de enfermedad coronaria obstructiva, ataques cardíacos y muertes relacionadas en un 20 a 35 por ciento, con el riesgo de aumentar en proporción directa a la cantidad de ejercicio. Al caminar, el nivel de colesterol LDL maligno, que se acumula en la sangre y causa estrechamiento y obstrucciones en los vasos cardíacos, disminuye. El nivel de HDL, el colesterol benigno que recoge las partículas de grasa en los vasos y los lleva al hígado, también aumenta. Las personas con altos niveles de triglicéridos, otra grasa en la sangre, también mejoran. Además del colesterol alto, que aumenta el riesgo de enfermedades coronarias, enfermedades como la presión arterial (hipertensión) y los niveles altos de azúcar en la sangre también se ven afectados positivamente por caminar regularmente. Como resultado, caminar conduce a una reducción en el riesgo de aterosclerosis, un cambio positivo en los valores de colesterol y una disminución en los valores de azúcar en la sangre y la presión arterial. Todos estos efectos positivos redujeron el riesgo de pérdida de vidas debido a enfermedades cardiovasculares hasta en un 35 por ciento.
Diabetes
El estilo de vida sedentario y la mala nutrición pueden llevar a la resistencia a la insulina y al aumento de peso, lo que puede resultar en diabetes en personas con predisposición genética. El desarrollo de la diabetes, que es una enfermedad común de nuestra edad y cuya incidencia aumenta día a día, trae consigo un aumento muy grave del riesgo de enfermedades cardiovasculares y cerebrovasculares. Caminar regularmente reduce el riesgo de diabetes al reducir la resistencia a la insulina y nos permite deshacernos del exceso de peso.
Cáncer de mama y de colon
La investigación muestra que caminar regularmente durante 30-60 minutos al día reduce significativamente el riesgo de cáncer de mama y colon. De hecho, el riesgo de cáncer de mama se puede reducir en un 25 por ciento en las mujeres que caminan regularmente durante toda la vida o después de la menopausia. Este efecto es más pronunciado en mujeres con peso normal, que han dado a luz y no tienen antecedentes familiares de cáncer de mama. Los estudios han demostrado que caminar regularmente puede reducir el riesgo de cáncer de colon hasta en un 24 por ciento. Se afirma que este efecto de caminar sobre el cáncer de colon se logra mediante el aumento de las deposiciones, el fortalecimiento del sistema inmunológico, la reducción de la liberación de insulina y hormonas similares, prevenir el aumento de peso y activar los sistemas que neutralizan las sustancias dañinas llamadas radicales libres.
Accidente cerebrovascular (parálisis)
Las muertes relacionadas con los accidentes cerebrovasculares han aumentado a un ritmo de hasta el 24 por ciento debido al envejecimiento de la población mundial, la hipertensión, la diabetes, el colesterol alto, el aumento del tabaquismo y el estilo de vida sedentario. La vida sedentaria aumenta el riesgo de desarrollar enfermedades cerebrovasculares oclusivas a través de mecanismos como el aumento de la presión arterial, el peso y el colesterol. Los estudios indican que el riesgo de accidente cerebrovascular disminuye en las personas que caminan regularmente.
Osteoporosis
La inactividad, que es un problema importante de nuestra edad, también afecta negativamente la salud o sea. La osteoporosis o osteoporosis es más común en personas físicamente inactivas. Como resultado de la osteoporosis, las fracturas potencialmente mortales a menudo pueden ocurrir en la articulación de la cadera y la columna vertebral a una edad avanzada. Además, durante el tratamiento de estas fracturas, también pueden desarrollarse complicaciones potencialmente mortales como la formación de coágulos en las venas de las piernas debido a la inmovilidad prolongada y la ruptura y bloqueo de los vasos pulmonares (embolia pulmonar). Caminar regularmente tiene un efecto positivo en el metabolismo óseo y fortalece los músculos. Estos efectos también reducen el riesgo de osteoporosis.
Síndrome Metabólico
El cuadro que se manifiesta con un aumento en el azúcar en la sangre, las grasas en la sangre y la presión arterial, el aumento de peso y un aumento en la circunferencia del vientre se llama “síndrome metabólico”. El síndrome metabólico, que se ha vuelto cada vez más común en la mediana edad en nuestro país, especialmente en las mujeres en los últimos años, se asocia generalmente con diabetes, hipertensión, colesterol alto y resistencia a la insulina, y puede causar estrechamiento y obstrucciones en el corazón y los vasos cerebrales, lo que puede conducir a un ataque cardíaco y accidente cerebrovascular. Los estudios han demostrado que este síndrome se puede revertir con una caminata regular.
Depresión
El ejercicio regular libera endorfinas, hormonas que nos hacen sentir bien. Hace que sea más fácil disfrutar de la vida, la calma y sentirse bien a través de las endorfinas secretadas en nuestro cuerpo. Cuando se hace regularmente, la persona que camina se siente más en forma y saludable como resultado de la pérdida de peso y el aumento de la tensión muscular. Todos estos efectos positivos tienen un impacto positivo en la vida social y la interacción con otras personas. De esta manera, ayuda a eliminar las preocupaciones y pensamientos negativos de nuestras mentes. Al contribuir a la mejora de la depresión y la ansiedad, que beneficia a nuestra salud mental, así como nuestra salud física.