¿Qué vacuna se debe administrar y cuándo? Todos los padres desean que los bebés nazcan sanos y vivan una vida sana. El camino hacia una vida sana después del nacimiento es, en primer lugar, tener todas las vacunas de los bebés sin interrupción.
Calendario de vacunación para sus hijos Las vacunas, que comienzan con la vacuna contra la hepatitis B inmediatamente después del nacimiento, protegen contra problemas de salud permanentes y muchas enfermedades que incluso pueden costar vidas. ¿Pero cuándo y qué vacuna deben recibir los niños? ¿Qué enfermedades se pueden prevenir con estas vacunas?
¿Qué vacunas se deben administrar en qué mes? Vacuna contra la hepatitis B: Proporciona protección contra el virus de la hepatitis B. El virus de la hepatitis B puede causar “hepatitis”, lo que significa inflamación del hígado. El virus puede causar hepatitis aguda, así como hepatitis crónica y cáncer de hígado. La vacuna se administra tres veces: inmediatamente después del nacimiento, a los 1 y 6 meses. BCG (vacuna contra la tuberculosis): La tuberculosis afecta más comúnmente a los pulmones. También puede causar enfermedades como meningitis, inflamación o sea, inflamación del tracto urinario y del riñón. La vacuna se administra en el segundo mes. Tos ferina, difteria, vacuna contra el tétanos: La tos ferina es una enfermedad peligrosa caracterizada por ataques de tos graves y persistentes, especialmente en niños pequeños. Los ataques de tos son tan severos que a veces el bebé tiene gran dificultad para respirar. Dado que los bebés aún no están vacunados en los primeros 2 meses después del nacimiento, se recomienda que las personas que están en estrecho contacto con el bebé, como las madres, los padres y los cuidadores, sean vacunados antes del nacimiento para su protección. El tétanos es una enfermedad potencialmente mortal caracterizada por contracciones graves de los músculos esqueléticos. Para proteger contra el tétanos neonatal, a cada mujer embarazada que no recibe la vacuna primaria se le administran 2 dosis con 1 mes de diferencia, y la última dosis se administra 2 semanas antes del parto a más tardar. La difteria (crup) es una enfermedad que puede conducir
a la obstrucción del tracto respiratorio superior. Puede conducir a insuficiencia cardíaca, que puede ser fatal con afectación cardíaca, y parálisis con afectación nerviosa. Las vacunas contra la tos ferina, la difteria y el tétanos se administran como parte de la vacuna mixta a las edades de 2, 4, 6, 18 meses y 4-6 años.
Vacuna contra la polio: Hay dos tipos de vacuna. La vacuna inactiva (virus muerto) se administra por vía oral en la vacuna mixta en los meses 2, 4, 6, 18 y entre las edades de 4-6, y la vacuna viva (virus debilitado) se administra por vía oral en los meses 6 y 18. Hoy en día, la poliomielitis ha sido erradicada del mundo gracias a las campañas de vacunación exitosas.
Vacuna contra el sarampión, la rubéola y las paperas: El sarampión, que se caracteriza por fiebre y erupciones cutáneas intensas en todo el cuerpo, puede causar otitis media, neumonía y encefalitis aguda durante la enfermedad, así como síndrome de Gallian-Barre y panencefalitis esclerosante subaguda después de la enfermedad. La rubéola es una enfermedad caracterizada por fiebre, ganglios linfáticos agrandados y erupciones cutáneas finas en el cuerpo. Aunque no causa una infección grave en el niño, puede llevar a un aborto espontáneo y a un mortinato si infecta a una mujer embarazada. Las paperas son una enfermedad que afecta las glándulas salivales y se caracteriza por hinchazón de las mejillas y fiebre. La inflamación del cerebro y sus membranas, la inflamación testicular y la inflamación de los ovarios en las mujeres son cuestiones importantes que se pueden ver durante la enfermedad. La vacuna contra el sarampión, la rubéola y las paperas se administra como una vacuna mixta entre los 9 y 12 meses y los 4 a 6 años.
Vacuna neumocócica: Las bacterias neumocócicas pueden causar enfermedades como otitis media, meningitis e inflamación o sea, así como neumonía. La vacuna se administra a los 2, 4, 6 y 12 meses. Vacuna contra la varicela (varicela): La varicela es una enfermedad caracterizada por fiebre, sarpullido acuoso y con comezón en el cuerpo. Puede causar enfermedades graves en bebés recién nacidos y adultos. Por ejemplo, la inflamación del cerebelo y el cerebro puede causar problemas graves. En raras ocasiones, puede causar el síndrome de Gullian-Barre. La vacuna se administra entre los 12 meses y los 4 a 6 años. Vacuna contra la hepatitis A:El virus de la hepatitis A causa hepatitis aguda con síntomas como ictericia, náuseas, vómitos y debilidad. En casos raros, puede conducir a insuficiencia hepática. La vacuna se administra a los 18 y 24 meses. Vacuna contra el rotavirus: El rotavirus es la causa más común de diarrea en los niños. Es especialmente importante para los bebés menores de 1 año porque causa una imagen de enfermedad grave con vómitos, diarrea, fiebre y pérdida de apetito, que puede durar hasta 1 semana y 10 días. Hay dos vacunas para el rotavirus. Estas vacunas se administran a intervalos de 2 meses antes de los 6 meses de edad. Uno de ellos se administra en 2 dosis y el otro en 3 dosis.
Vacuna meningocócica: Las bacterias meningocócicas pueden causar una enfermedad grave llamada vemeningococcemia. Hay 2 variantes de la vacuna que se pueden administrar en 2 dosis en 9-12 meses o una sola dosis a partir del 12º mes
Virus de la influenza (vacuna contra la gripe): fiebre, dolores musculares, tos, dolor de garganta y, a veces, neumonía. Se recomienda hacerlo a finales de octubre y noviembre de cada año.
Vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH): El VPH es un virus que puede causar verrugas genitales y cáncer de cuello uterino en las mujeres. Se administran 3 dosis desde los 9 años.
¿Qué vacuna se debe administrar y cuándo Completar el calendario de vacunación Las vacunas no solo proporcionan protección contra enfermedades que afectan la salud personal, sino también contra enfermedades infecciosas que pueden amenazar la salud pública. Por esta razón, las vacunas no deben dejarse a las preferencias personales, y se debe garantizar que el calendario de vacunación recomendado por el estado se complete en su totalidad.