Recomendaciones nutricionales especiales para niños Durante la edad de desarrollo, los niños crecen constante y lentamente. La nutrición equilibrada y regular es el factor más importante para un crecimiento saludable.
Los niños que comen sano hacen adultos sanos La nutrición saludable juega un papel clave de oro en el desarrollo positivo de los niños. Una dieta saludable durante este período también previene los problemas de salud relacionados con la diabetes, la presión arterial, la obesidad, las enfermedades del corazón y el colesterol alto que se pueden ver en la edad adulta.
Beber agua y suero de leche en lugar de bebidas gaseosas
Las bebidas carbonatadas contienen gas CO2 y altos niveles de azúcar, que son perjudiciales para la salud humana. Algunos también contienen cafeína y colorantes. En lugar de estas bebidas, que también pueden causar reacciones alérgicas, es necesario enseñar a los niños que el principal líquido que deben beber es agua, y acostumbrarse a ayrán y kéfir.
Acostúmbrate a los aperitivos caseros Los aperitivos en los supermercados contienen aditivos y tintes. Además de las reacciones alérgicas, estos alimentos pueden causar enfermedades cardiovasculares, diabetes, estómago e intestinales a largo plazo. Los niños deben estar acostumbrados a refrigerios como papas fritas hechas de nueces, frutas y verduras secas y pasteles hechos de plátanos, dátiles o melaza. Por ejemplo, es posible preparar mantequilla de maní en casa con miel, maní y mantequilla sin usar azúcar en lugar de comprarla en el mercado.
Haz que coma desayunos prácticos El desayuno es una de las primeras reglas de una dieta saludable. Asegúrese de que los niños desayunen con alimentos y bebidas que se pueden preparar en casa, como sándwiches, pasteles, 1 fruta, huevos, queso, panqueques, avena y un vaso de leche o suero de leche.
Acepta que no te gustan algunos alimentos
Algunos niños pueden sentirse repelidos por el olor de ciertos alimentos. El olor a queso y huevos, incluso si están en la comida, puede ser desagradable. Algunas verduras pueden no gustar porque huelen cuando se cocinan, y algunas verduras pueden no gustar porque se ven desagradables. Acepte que hay algunos alimentos que a los niños no les gustan y que no los presionan. Trate de presentar los alimentos de la manera que quieran. Si no comen huevos duros, haga una tortilla, si no beben leche caliente, haga leche fría o de plátano, si no comen verduras, haga sopa de verduras o albóndigas con verduras o papas fritas al horno.
Comience a restringir los dulces en la infancia Es muy importante restringir la introducción de alimentos dulces a los niños desde la infancia. Porque cada niño extraña el sabor de lo que está acostumbrado a comer. Por esta razón, los alimentos que son objetables para ser consumidos deben ser degustados muy raramente, y sus inconvenientes deben explicarse bien para que no los consuman cuando sus padres no están cerca o los consumen muy raramente.
Tampoco es correcto prohibirlo completamente También es dañino prohibir por completo ciertos alimentos poco saludables que son consumidos por los amigos de otros niños. En cambio, es necesario explicar pacientemente los daños de estos alimentos en un lenguaje que puedan entender, y convencerlos de consumirlos raramente haciendo discursos educativos sin aburrirlos. Esto contribuye a la conciencia del niño sobre la alimentación saludable, incluso si no sucede de una sola vez.
No alimente mientras juega con una tableta o teléfono Uno de los errores más comunes que los padres cometen es permitir que sus hijos coman mientras juegan juegos en el teléfono, la tableta o con los ojos enfocados en la televisión. Esto impide una dieta saludable y hace que los alimentos se coman rápidamente sin masticar bien. Esto conduce a trastornos estomacales, consumo excesivo de calorías y aumento de peso. Por esta razón, es necesario enseñar a los niños a masticar bien su comida y no sentarse a la mesa con un teléfono o tableta en sus manos.
¡Demasiada comida buena también es dañina! Es importante recordar que no es correcto consumir demasiados alimentos beneficiosos, así como alimentos dañinos en el marco de una dieta saludable. Por esta razón, enfatizar el jugo de frutas porque los niños no comen frutas o no les dan leche porque no comen alimentos causa daño en lugar de beneficio. Por ejemplo, demasiada leche
causa anemia, demasiados alimentos que contienen proteínas causan estreñimiento, y demasiado consumo de jugo de fruta causa demasiado consumo de azúcar.
No dé alimentos poco saludables como “recompensas” A los niños no se les deben ofrecer alimentos poco saludables como recompensa. Aunque estos alimentos pueden ser agradables, se debe explicar constantemente que el consumo frecuente de estos alimentos es perjudicial para la salud. Explique que un alimento saludable como el helado se puede consumir de una buena marca que se vende al aire libre, no en un paquete cerrado. En el caso de los helados, explique de una manera que puedan entender que los helados envasados cerrados pueden contener demasiado azúcar y colorante y pueden producir gérmenes a medida que se derriten y se vuelven a congelar debido a la falta de cumplimiento con la cadena de frío durante el transporte al mercado.
Preparar comida rápida en casa Prepare alimentos similares, pero saludables y rápidos de comer en casa para que no parezcan comida rápida.
Recomendaciones nutricionales especiales para niños Investigar la razón de no querer comer Si los niños crecen con una cultura de alimentación saludable, se convertirán en adultos sanos. La nutrición saludable no solo debe exigirse al niño, sino que toda la familia debe seguirla y lograr el éxito. Además, es importante no ignorar el hecho de que la renuencia de los niños a comer puede estar motivada por problemas graves. Los trastornos de la tiroides, la enfermedad celíaca, los parásitos y la diabetes se pueden ver en niños que comen una dieta equilibrada pero no aumentan de peso, mientras que los trastornos de la tiroides y la resistencia a la insulina se pueden ver en niños que comen una dieta equilibrada pero ganan exceso de peso. Si se observa tal situación, es necesario consultar a un endocrinólogo, gastroenterólogo o dietista con la recomendación del pediatra.