Terapia Ocupacional La terapia ocupacional es un conjunto de métodos que tienen como objetivo reducir la dependencia de las personas que tienen pérdida crónica de la función debido a un problema de salud en otras personas en su vida cotidiana y para aumentar su funcionalidad. Curiosidades sobre este tratamiento aplicado por terapeutas ocupacionales están en nuestro artículo.
¿Qué es la terapia ocupacional? La terapia ocupacional es un tratamiento holístico que hemos escuchado cada vez más en los últimos años. La terapia ocupacional, conocida como terapia ocupacional en inglés, se aplica a las personas que tienen una discapacidad para realizar sus actividades físicas diarias. La terapia ocupacional, que se desarrolla contra las limitaciones de movimiento que se producen en casos como dolor, lesiones, enfermedad o discapacidad, proporciona resultados efectivos en muchos niños, ancianos y personas con discapacidad.
En terapia ocupacional, se pretende incluir a las personas en la vida cotidiana aumentando las actividades diarias a los niveles deseados de acuerdo con sus intereses y necesidades. Las personas sometidas a terapia ocupacional tienen la oportunidad de satisfacer sus necesidades con la ayuda de ciertos dispositivos y aparatos. La terapia ocupacional es en realidad una forma de tratamiento que enseña cómo adaptarse en la escuela, el hogar, el trabajo, etc. En caso de necesidad, los dispositivos de asistencia se utilizan en el ámbito del tratamiento de terapia ocupacional. Los propósitos de la aplicación de la terapia ocupacional se pueden enumerar como sigue:
Para poder hacer trabajo de oficina Para poder tomar un baño Vestirse Poder realizar actividades en su tiempo libre Comer sin la ayuda de otros Lavar la ropa Ser capaz de limpiar en casa Conducir un coche Poder cocinar
Terapia Ocupacional;
Ayuda a un trabajador lesionado a recuperar su profesión y las habilidades que necesitan,
Apoya a las personas mayores con cambios cognitivos y físicos, permite al niño participar en entornos escolares y sociales.
La terapia ocupacional ayuda a los niños a jugar y realizar sus actividades diarias y mejora su rendimiento escolar. Estos niños, que experimentan un mayor éxito y confianza en sí mismos, se desarrollan de la siguiente manera:
Los niños pueden agarrar y soltar juguetes, desarrollar habilidades motoras para escribir a mano o usar una computadora.
Mejora la coordinación mano-ojo. Esto puede mejorar sus habilidades en la escuela y jugar a la pelota.
Pueden bañarse, vestirse, cepillarse los dientes y alimentarse. Pueden moverse por su cuenta con ayudas tales como sillas de ruedas, tablillas, equipos de baño, equipos de comunicación.
El habla juega un papel importante en la terapia ocupacional en los niños. El habla depende más de la atención, la memoria, el sistema visual y auditivo. La terapia ocupacional trata de mejorar los aspectos del desarrollo del niño relacionados con el habla y la comunicación.
Diferencias entre Terapia Ocupacional y Terapia Física La terapia ocupacional es aplicada por personas que tienen educación de pregrado en Terapia Ocupacional. En otras palabras, es necesario estudiar Terapia Ocupacional para aplicar este tratamiento. Estas personas, también conocidas como terapeutas ocupacionales, también pueden tratar con diferentes áreas dentro de sí mismos. Por ejemplo, pueden centrarse más en la terapia de manos para personas con problemas de visión, o algunos pueden centrarse en la terapia del habla para niños con problemas del habla. Los terapeutas ocupacionales a menudo trabajan junto a médicos, fisioterapeutas, psicólogos y otros profesionales de la salud.
¿A quién se aplica la terapia ocupacional? La terapia ocupacional puede aplicarse a personas de todas las edades, desde niños y jóvenes hasta adultos de mediana edad y mayores. Las condiciones de los adultos que necesitan más terapia ocupacional son las siguientes:
Parálisis Artritis Síndrome de dolor crónico Daño cerebral Pérdida de visión Lesión medular Problemas articulares Fracturas óseas
Problemas ortopédicos Alzheimer Problemas de equilibrio Cáncer Diabetes Esclerosis múltiple (EM) Parálisis cerebral Problemas postoperatorios Amputación traumática Lesiones graves en las manos Autismo Enfermedades congénitas Reumatismo infantil (artritis idiopática juvenil) Lesiones y quemaduras graves Trastornos del desarrollo Spina bfida
¿Cómo se aplica la terapia ocupacional? En primer lugar, los terapeutas ocupacionales miran cómo la persona realiza movimientos y apuntan a mejorar esto. En otras palabras, tratan de mejorar la capacidad de la persona para realizar movimientos de manera más fácil o menos dolorosa. En la primera reunión se determinan las necesidades. Luego, antes de pasar a las actividades de terapia ocupacional, el terapeuta ocupacional puede visitar a la persona que recibirá la terapia en su propia área. Si la persona es un niño, el terapeuta ocupacional puede ir a la escuela; para una persona mayor, el terapeuta ocupacional puede visitar el hogar. Si hay una necesidad de productos como bastones o muebles, estos se proporcionan. Les dicen cómo se pueden hacer mejor las tareas diarias. Luego se elabora un plan terapéutico. Se realizan prácticas para mejorar las habilidades motoras y la coordinación mano-ojo. En el ámbito de la terapia ocupacional pueden introducirse las siguientes mejoras:
Aprenda a usar ayudas para tazones de inodoro altos o sillas de ruedas. Ayudar a las personas mayores a prevenir caídas en sus hogares o en lugares públicos. Aprende nuevas formas de abotonar camisas, atar zapatos, entrar y salir de la ducha y trabajar en la computadora.
Se les puede ayudar a usar medicamentos y electrodomésticos. Las personas que han tenido un accidente cerebrovascular pueden recibir entrenamiento para restaurar su equilibrio, prevenir lesiones en el hogar, fortalecer sus músculos y adaptarse a los problemas de memoria y del habla.
Se puede ayudar a los niños con trastornos del comportamiento, como golpear a otros.
Se realizan actividades para asegurar la coordinación mano-ojo. Las habilidades motoras se practican para acciones tales como agarrar un lápiz.