Una dieta inadecuada puede aumentar la gravedad de los ataques de pánico La nutrición adecuada es de gran importancia en los ataques de pánico, conocidos como un estado de miedo y ansiedad. Se debe tener cuidado especialmente cuando se consumen bebidas que contienen cafeína que pueden aumentar las palpitaciones.
La relación entre los ataques de pánico y la nutrición Un ataque de pánico, que hace que una persona piense y sienta que el mundo está llegando a su fin, ocurre repentinamente, inesperadamente y en un momento inesperado. Durante un ataque de pánico, la persona experimenta miedo intenso, ansiedad y abrumación. Tanto es así que él/ ella puede pensar que él/ ella se desmayará o incluso perder su/ su vida. El cerebro domina el cuerpo durante un ataque. Los cambios en las emociones de una persona en estado de pánico también pueden causar problemas en el metabolismo. Del mismo modo, algunos errores cometidos en la dieta pueden causar problemas psicológicos y, posteriormente, ataques de pánico.
¡Cuidado con las deficiencias de vitamina B! Los trastornos psicológicos a menudo son causados por una deficiencia de B1, B3 y B12. La deficiencia de vitamina B1, que se encuentra en cáscaras de arroz, verduras, frutas y productos de grano entero, puede conducir a problemas neurológicos y aumentar la tendencia a la depresión. La vitamina B3, que es importante para el sistema nervioso, se encuentra en productos como la leche, el queso, los huevos y la carne. La vitamina B12 se encuentra más en el hígado, los riñones y la carne roja. En su deficiencia, pueden ocurrir trastornos neurológicos y depresión. Especialmente en las personas propensas a la depresión, la nutrición adecuada de las vitaminas del grupo B es de gran importancia para una vida saludable y de calidad.
Los ataques de pánico desencadenan la presión arterial y la diabetes Las hormonas en el cuerpo se secretan más en algunas situaciones específicas. La adrenalina, que se libera durante la emoción y el miedo, causa palpitaciones, dificultad para respirar y
enrojecimiento. Dado que la emoción y el miedo se sienten al mismo tiempo durante el ataque, las liberaciones hormonales que desencadenarán enfermedades como la presión arterial y la diabetes comienzan en el cuerpo. La nutrición juega un papel muy importante en esta enfermedad, como lo hace en todas las enfermedades, ya que todo el metabolismo de la persona es dirigido por las sustancias formadas como un
resultado de la digestión de los alimentos. Algunos de los malos hábitos alimenticios pueden aumentar la frecuencia y la gravedad de los ataques de pánico.
Una Dieta Inadecuada Puede Aumentar La Gravedad De Los Ataques De Pánico Hábitos dietéticos que causan ataques de pánico Consumir alimentos ricos en cafeína y pobres en vitaminas y minerales, una dieta que no está equilibrada en términos de carbohidratos, grasas y proteínas, una dieta monótona y ayuno prolongado puede causar ataques de pánico.
No consumir el jugo de yogur y consumir claras de huevo antes de que estén completamente cocidas puede causar que las vitaminas se excreten del cuerpo, causando así tendencias de depresión. Además, una dieta vegetariana puede llevar a problemas psicológicos, ya que evita las vitaminas B de la carne.
Consumir alcohol puede causar alivio en personas con ataques de pánico al principio, pero puede llevar a la adicción.
Las dietas que son muy bajas en calorías con la promesa de una rápida pérdida de peso afectan negativamente todo el metabolismo y causan deficiencias de vitaminas y minerales.